Se dice del desierto de Namib que es el más antiguo del mundo. Formado en la Era Terciaria, hace 65 millones de años, se extiende sobre una superficie de 81.000 Km2, y da nombre al país.
Con independencia de estos números, que dan idea de la magnitud e importancia de esta zona tan especial del planeta, lo cierto es que, para nosotros, ha resultado ser el desierto más bonito de todos cuantos hemos visitado hasta la fecha, y tiene bien merecido ser la imagen icónica que todo viajero tiene en mente cuando se habla de Namibia.
La parte más conocida por los turistas es la del Parque Nacional Namib-Naukluft, el mayor parque natural del todo África, al que se accede desde el turístico pueblo de Sesriem. Dentro pueden encontrarse algunas de las dunas de arena más altas del mundo y el que es sin duda el atractivo más importante y fotografiado del desierto de Namib, el Deadvlei.
Cómo llegar al Desierto de Namib.
Desde Windhoek hay algo más de 300 KM en su mayor parte de carretas de tierra y grava que, al menos en agosto-septiembre, son perfectamente transitables sin necesidad de 4×4. A poco que te descuides tardas más de cinco horas en completar el recorrido.
Que las carreteras sean transitables no significa ni mucho menos que sean carreteras cómodas y agradables de conducir, sino más bien todo lo contrario, aunque las cinco horas de camino bien merecen la pena cuando llegas al desierto. Resulta curioso además que ya, una vez entras en el Parque Nacional Namib-Naukluft, te encuentres con una buena carretera asfaltada.
El último tramo es realmente espectacular, plagado de paisajes descomunales de los que es imposible hacerse una idea con una simple fotografía, y donde es muy fácil cruzarse con Oryx salvajes, e incluso con alguna girafa solitaria del desierto.
Desde Walvis Bay, en la costa, la distancia es muy similar, y las carreteas son igual de malas, aunque también es posible hacer el trayecto sin necesidad de 4×4.
Qué ver en el Desierto de Namib (Parque nacional Namib-Naukluft).
La visita al parque requiere de un día completo. El precio de la entrada es de 150 N$ por persona, y dentro, las visitas mas importantes son:
La Duna 45.
Situada a 45 KM de la entrada de Sesriem (Por eso su nombre) es una de las dunas más visitadas del parque, sobre todo para ver el amanecer o el atardecer. Desde su cima, a 170 metros de altura, se tiene muy buenas vistas abiertas al este y oeste.
La subida a la duna requiere de cierto esfuerzo físico. A la pendiente se le añade lo difícil y cansado que resulta andar sobre arena. A ratos te falta el aire, y se tiene la sensación de que cuesta muchísimo avanzar.
Una vez en lo alto las vistas son alucinantes.
Llama mucho la atención el color rojizo de la arena de la duna, lo que se debe a la oxidación durante miles de años de las partículas de hierro que contiene. Cuanto más roja es la duna más antigüedad se la supone
Mucho más divertido resulta luego bajar la duna corriendo. Una vez llegas abajo es necesario quitarse el calzado y vaciar la arena que se ha acumulado en el interior durante del descenso.
Si se quiere disfrutar del amanecer desde su cima es absolutamente necesario alojarse en el interior del parque de Namib-Naukluft, ya que sino, hay que esperar a que abran las puertas del parque y no es posible llegar a tiempo y ascender la duna antes del amanecer.
Deadvlei.
Sin duda la atracción principal del parque. Su nombre significa lago muerto, y es que en ese punto existió en su día un lago salado, donde crecieron arboles que por la sequia quedaron allí fosilizados.
La imagen de los troncos petrificados bajo la enorme duna Big Dady y el blanco del salar es tan espectacular como surrealista. Más propia de un cuadro de Dalí que de otra cosa.
Paseando por Deadvlei se tiene la sensación de estar en otro planeta, o en una realidad paralela nunca antes vista. Nosotros tuvimos la suerte además de verlo a ratos en absoluta soledad, a lo que ayudó que llegáramos allí a última hora de la tarde cuando apenas quedaba ya turistas.
Para recorrer los últimos 2 o 3 kilómetros que separan el Parking de Sossusvlei y Dead Vlei es necesario un buen 4×4 y experiencia en la conducción, o bien, contratar el shuttle oficial que ofrece el parque (150 N$ ida y vuelta por persona), lo que creemos que es en todo caso muy recomendable para evitar disgustos innecesarios, pues vimos un montón de 4×4 encallados y sus ocupantes pasando enormes dificultades para sacar los coches de la arena. El trayecto es también espectacular.
Duna Big Daddy.
Se trata de la enorme duna de arena roja que rodea Dead Vlei. Sin duda las vistas desde la cima deben ser espectaculares, pero después de haber subido la duna 45 ni se nos pasó por la cabeza ascender sus 325 metros de altura.
Cañon de Sesriem.
Situado a menos de 5 Km de Sesriem, se trata de un cañon natural, en algunos tramos con una profundidad de 40 metros. Por desgracia nosotros no tuvimos tiempo suficiente para ir a vistarlo.
Qué ver en los alrededores del desierto de Namib.
Fuera del Parque nacional Namib-Naukluft existen otros lugares interesantes que conviene visitar:
La gasolinera de Solitaire.
A 80 Km de Sesriem, se encuentra esta antigua estación se servicio en medio de la nada, que en su día era el único punto donde poder repostar en cientos de kilómetros a la redonda. El lugar, repleto de coches abandonados y decoración vintage, resulta muy fotogénico.
Es una parada obligada en el camino desde o hacia el desierto de Namib. Cuenta además con el reclamo de su famosa cafetería, McGregor´s Bakery, donde dicen se vende el mejor Apfelstrudel de todo el país.
Spreetshoogte Pass.
Algo más a desmano, salvo que como nosotros, tengáis previsto llegar a solitaire desde Windhoek por la D1275, se encuentra este paso de montaña desde cuya cima se tienen unas impresionantes vistas de las enormes y sobrecogedoras llanuras desérticas que hay en los aledaños al parque nacional de Namib-Naukluft.
Cartel del Tropico de Capricornio.
Algo más al norte de Solitario, en la carretera que va hacia Walvis Bay, es también obligatoria la parada para fotografiarse junto al cartel que indica que estamos sobre la línea del trópico de capricornio.
Donde alojarse para visitar el desierto de Namib.
La única opción de alojamiento en el interior del parque nacional de Namib-Naukluft, es en Sesriem Campsite de la empresa gubernamental de NMR . Solo dispone de zonas de acampada y es necesario reservar con varios meses de antelación para asegurarse la plaza.
Fuera del parque, pero junto a la entrada, se encuentra el Desert Quiver Camp, que tiene muy buenas recomendaciones. La verdad es que sus bungalows y la piscina tienen una pinta fantástica. También es necesario reservar con mucha antelación.
Nuestra elección y recomendación esta sin embargo cerca de Solitaire, a una hora y media de Sesriem. Se trata de Camp Gecko (Spaarwater – Namibia): Sin duda el mejor y más especial alojamiento de todo nuestro viaje. Es un Camp que ofrece también Tents familiares muy nuevas y bien montadas, otras para dos personas en dos plantas más espectaculares aún, y zonas de acampada privadas con baño al exterior. El emplazamiento en mitad del desierto es tan salvaje como espectacular. Las puestas de sol y cielos estrellados inolvidables. Está a menos de 30 minutos de Solidere. No tiene luz eléctrica, lo que se resuelve con unos frontales. El agua de la ducha se calienta con leña que dejan preparada. Lo regenta una pareja joven alemana que se desvive por sus clientes. Preparan un set de barbacoa con carne, patatas, verdura y postre que merece muchísimo la pena. Volveríamos allí una y mil noches.