Día 10: Bahía de Drake
Para este día teníamos previsto acercarnos hasta la playa de San Josecito, y desde allí recorrer el sendero que va de vuelta hasta Drake conociendo las playas que hay por el camino. La otra opción de barajamos, y finalmente desechamos, era la que hicieron nuestras compañeras y los niños, el Tour en barca a la cercana Isla del Caño, donde se puede bucear, hacer esnórquel, y es fácil ver tortugas, delfines, quizás algún tiburón, y con algo más de suerte ballenas.
Empezamos mal el día. El cansancio acumulado del viaje, y el ajetreo del día anterior, hicieron que se nos pegaran las sábanas y nos levantamos bastante tarde. Cuando salimos del hotel eran casi las 09:30 de la mañana y ya pocos turistas quedaban por la calle, con lo que era difícil encontrar también taxis o algún conductor que nos quisiera llevar hasta San Josecito. Preguntamos en un par de sitios pero los precios que nos daban por llevarnos hasta San Josecito eran descacharrantes. Del orden a 50 USD.
Tampoco era barata la opción de alquilar un Quad, pues nos pedían 35 USD por 3 horas, y nos obligaban a alquilar dos.
Visto el percal, y a falta de otras opciones, decidimos aventurarnos a recorrer a pie el sendero costero sabiendo que difícilmente nos daria tiempo a ir andando hasta San Josecito, con lo que decidimos tomarnos el recorrido con mucha calma, parando en cada una de las playas y calas que nos fuimos encontrado por el camino.
Playa Colorada (Agujitas de Drake):
Es la playa de la propia Bahía de Drake, desde donde salen y llegan las barcas. Es una playa muy extensa, de arena rojiza, y aguas bastante tranquilas en comparación con el resto de las que vimos. Desde esta playa sale el sendero que una Drake con la playa de San Josecito bordeando la costa.
Trayecto desde la Playa Colorada hasta la playa de Cocalito:
La primera parte del sendero ya la conocíamos de la tarde anterior. No obstante, como íbamos sin prisa nos detuvimos un buen rato en la zona de puentes colgantes para contemplar el rio y la selva. Naturaleza salvaje en estado puro. Desde uno de los puentes era fácil ver las enormes barracudas que nadaban bajo el agua del rio.
Otra de las paradas que hicimos durante el trayecto fue en un pequeño y curioso bosque de bambús. El día anterior habíamos visto aquí una familia entera de monos capuchinos comiendo dátiles.
Una vez en la playa de Cocalito, tiramos la toalla y nos dimos unos cuantos chapuzones. El agua es más cálida de lo que pensábamos para ser el pacífico, eso si, las corrientes y el oleaje se hace notar. La playa de Cocalito nos vuelve a perecer una pasada.
De playa Cocalito a playa Las Caletas:
El sendero se vuelve a partir de Cocalito más salvaje y abrupto. Por el camino nos fuimos cruzando con otras pequeñas calas a cada cual más sugerente.
En esta zona es más facil encontrarse con animales en libertad: Vemos Tucanes y Guacamayos, y una pareja de pavos salvajes.
La playa de Las Caletas nos parece más bonita incluso que Cocalito, y sobre todo, mejor para el baño porque las olas y las corrientes son menos acusadas.
Como era la hora de comer, entramos a preguntar en el Hotel Las Caletas y en Copa De Arbol Beach & Rainforest Resort. Los dos estaban cerrados. Según nos contó el vigilante del segundo por culpa del covid los turistas no iban, y es verdad que durante todo el día recorriendo esa zona de costa no creo que nos cruzaramos con más de 3 o 4 turistas. Una pena, poque los dos tenían una pinta estupenda, y hubiera sido buena ocasión para comer allí.
En el jardín del Copa De árbol Beach vimos un bicho hoja con el que estuvimos alucinando un buen rato. La verdad es que quien lo vio fue Martina, y es que se camuflan tan bien adoptando la forma y color de las hojas adyacentes que es muy difícil verlos.
Sin nada que comer más que unas tortitas de Maiz y un par de plátanos, y lejos aún de San Josecito, decidimos volvernos a Drake, no sin pararnos unas cuantes veces más para disfrutar de las fantasticas playas y calas de la Bahía de Drake.
Ya por la noche salimos a cenar. Tenia apuntado que se comia muy bien en Casa El Tortugo (https://goo.gl/maps/iSUmVY3s8mCG3iBfA), y allí que nos fuimos. La verdad es que cenamos muy bien, y el ambiente nos pareció muy agradable.